Sin embargo, tendrán que acudir primero a la Justicia Especial para la Paz, donde deberán decir la verdad, y de acuerdo con las decisiones judiciales se determinará si podrán acudir al parlamento.

Así lo explicó Pablo Julio Cruz Ocampo, abogado de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), actual representante de las Farc y miembro de Voces de Paz en el Congreso de la República, durante la Cátedra de la Paz que se realiza en la U.N. Sede Manizales.

En cuanto a un posible candidato presidencial, reiteró que esta organización ha hecho un llamamiento a hacer una gran coalición para construir un gobierno de convergencia que entre sus propósitos, además de las urgencias y necesidades del pueblo colombiano, tenga como meta la consolidación del proceso de paz.

Esta convergencia implica la sumatoria de diversos sectores de la opinión política y ciudadana para definir el candidato que pueda representar esa coalición.

Se habla de personajes como Piedad Córdoba, Humberto de la Calle, Sergio Fajardo y Clara López, que aportarían y encarnarían lo que este grupo denomina como “una gran convergencia por la paz y la democracia de Colombia”.

El vocero de las FARC indicóque del 27 de agosto al primero de septiembre, las Farc realizarán su congreso y se transformarán en partido político, lo que implica su desaparición como grupo armado ilegal.

“En este encuentro sus miembros establecerán unos estatutos y un programa, definirán sus directivos y, además, acogerán el nombre de  organización política”, explicó el vocero de las Farc en el Congreso de la República.

Es de recordar que las elecciones para el Congreso se llevarán a cabo en marzo de 2018 y para Presidencia en mayo del mismo año.

Al convertirse en partido político, este grupo tendrá cinco curules en el Senado y cinco en la Cámara de Representantes, asignadas de forma directa en el acuerdo con el Gobierno Nacional.

Decisión irrevocable

Para el abogado Cruz Ocampo, las Farc ya desaparecieron en la práctica, porque se desmovilizaron voluntariamente contra todo pronóstico, en particular, el de los enemigos de la paz.

En segundo lugar, con el acto de la entrega de armas se demostró su voluntad, en el entendido del pacto suscrito en La Habana (Cuba), ante una organización internacional como las Naciones Unidas, que fue garante del desarme.

“Recuperar la confianza es un reto que tiene este proceso. La insurgencia ha cumplido hoy lo pactado, incluso en condiciones de adversidad. El Gobierno ha tenido algunas dificultades y obstáculos para hacer lo suyo. No obstante, las Farc han mantenido su decisión y criterio irrevocable de dejar la lucha armada”, concluyó el egresado de la U.N.

Para el profesor Germán Albeiro Castaño Duque, vicerrector de la U.N. Sede Manizales, esta Institución de Educación Superior fomenta espacios donde convergen las corrientes del pensamiento de la paz, igual de quienes hacen oposición.

Indicó que se busca que los estudiantes y participantes conozcan diversas perspectivas sobre el conflicto armado que se prolongó drurante 52 años, y sobre el acuerdo de paz, que hoy da una nueva esperanza al país.